miércoles, 12 de septiembre de 2007

Culebrones y Ocio Equino: Movimiento o Parapeto

Por: Resentido Común


Este exabrupto ha sido parido en medio de lo especiales que somos, día y noche buscamos significado a lo fenomenales que nos sentimos a pesar de lo arcaicos y creyentes del la astrología. Alude a los años que hemos perdido discutiendo por épocas sin sol en las ideas y otras alumbrados gracias a la chicha repartida con democrática igualdad.

Esta perversidad, equino-ocio, quiere celebrar la inutilidad de vaciar lineales opiniones de corto alcance brindando con espontaneidad, con pasión distribuida y compartida decisión por informar lo que nos plazca.

Si el ocio es derecho de todos y a algunos queremos darle sentido a nuestro tiempo, en este nuevo milenio hacía falta compartir las caballadas. Con el nombre de equino-ocio nos hacemos voluntarios para inspirar sonrisas y colaborar con montársela a los explotados por la lectura, nosotros trataremos de buscar espíritus inspirados para renovar las fiestas y tener entregas de licor futuras.

Si con mayas me decían que me veo como un cacalán, la diosa más hermosa de los cultivos, ahora con mi identidad secreta les voy a enseñar de sabia poesía incoherente.

Construiremos así, con perversión y arquetípica, las sombras de las plataformas invertidas en proyecciones de serpientes famosas que se representan a sí mismos.

La alteración cósmica que nos ha causado tanta celebración y tanto aspirar nos ha encasillado en afirmaciones poéticas sin rumbo alguno. Retomamos las ideas alusivas a la libertad de botar escape con la hermosura de jugar sin uso de la fuerza y sin el sonsonete del recuerdo de los traumas de otros:

También el pensador pordiosero
(la gracia de Tomar) de goterero
de noche y con las negras Díaz

Se nos mueve el pilín, y de ahí, a la pieza
Qué no me gusta por detrás, ¡por Dios!, empiezan.
me da sueño y del polvo a la agonía

Escrito por: Avaro Ramales Espina


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